lunes, 30 de mayo de 2016

EN HONOR A LA VERDAD

LA CALLE REAL
Armenia, mayo 29 de 2016


EN HONOR A  LA VERDAD

Gilberto Montalvo Jiménez




El 17 de febrero de 2016 comenzó la carrera periodística de Vicky Dávila.

Ese día por decisión de un gobierno corrupto hasta los tuétanos en las más sensibles estructuras de sus intestinos presionando desde su presidente Santos a sus aliados estratégicos para  el mantenimiento de la podredumbre lograron elevar a la dignidad de desempleada a la periodista, aunque simultáneamente como pasa con estos cafres, no se dieron cuenta de que se había destapado una olla a presión que se mantenía hermética y en ebullición  en medio de las truculencias y con el desdén de quienes deben defender los principios fundamentales de los colombianos.

Amordazar, perseguir y lapidar la prensa y a los periodistas es una  comprobada actividad de facinerosos vestidos con el ropaje de un poder espurio para mantenerse, en este caso, con un 20 % de ínfima aceptación. Los hechos son tozudos.

Jamás lo han logrado.

Vicky Dávila cuenta con el apoyo de una mayoría silente de este país que asistió a su destitución desde un programa de CNN Televisión cuando, en un acto inusual, un presidente se despoja de su ropaje institucional, para vestirse de “periodista” y presionar impunemente la salida de la directora de la FM en un hecho intimidante porque la majestad del poder no tiene par con un periodista del común y del corriente.

La Organización Ardila Lulle, presionada por todos los flancos y ante el maridaje incestuoso que mantienen los empresarios colombianos con el poder político para despojar de mínimos a los colombianos, entregó en bandeja de plata  la cabeza de una periodista incomoda frente a la corruptela estatal, especialmente, porque develaba  las porquerías dentro de la policía nacional, institución apreciada por todos, pero permeada por la asquerosidad criminal  de muchos oficiales  que incluso han llegado  a su dirección.

Sin embargo, vale acotar no ha podido despojarse este emporio económico de ser un corrupto miembro del cartel del azúcar.

Podridos todos.


En Honor a la Verdad es un libro doloroso para quienes compartimos profesión con Dávila pero sobre todo para los colombianos que en su intimidad no saben que dentro de  las estructuras del poder, entre ellas la policía,  se cuecen toda suerte de putrefacciones que logran favores sexuales corrompidos por el poder de la línea de mando, llenan sus alforjas con claros usufructuos de su mandancia y persiguen inmisericordemente a quienes tienen la osadía como Vicky de penetrarle sus estructuras criminales y ponerlas en evidencia ante la opinión pública.

El libro de Vicky es un texto sencillo, llano, sin arabescos, en donde recopila paso a paso una investigación tortuosa pero profunda, honesta  y profesional  de toda la corruptela en el almendrón del mando institucional de la policía nacional.

Una policía permeada por la criminalidad en muchos de sus cuadros, alcahueteada por un ministro como Luis Carlos Villegas, la más vergonzosa representación política que ha tenido esa cartera  en su historia, con un presidente autista por derecho genético propio y en veces haciéndose el guevón, además, de un círculo cerrado de misteriosos consejeros amén  de que su director Rodolfo Palomino, pareciese  más en sus explicaciones un remedo deplorable de Cantinflas haciendo creer de su impoluta hoja de vida de campesino santandereano a sabiendas que  no es mas que un truco para hacerse millonario, recibir dádivas y “rebajitas”, comprar tractomulas mientras fungía de jefe de las policía de carreteras y en fin llegar hasta la presunta posibilidad de pedírselo a sus subalternos.

Todo está relatado con documentación en ‘En Honor a la Verdad’, un libro apasionante que se lee de un tirón y que debe constituirse en materia de estudio y discusión en las salas de redacción y en los debates de los programas de comunicación social.

Un video de dos maricones puesto al aire por la periodista como una pieza contextual  del rompecabezas de la altisonante y criminal “Comunidad del Anillo” sirvió de pretexto para despojar de su empleo a  Vicky Dávila aunque  esto fue solo una mascarilla que desvió la discusión de la podredumbre corrupta al interior de la policía.

Si el video ha debido o no ser editado, que si invadía la órbita intima de dos homosexuales hablando de sus travesuras de cama fue el gran debate que sirvió de campana neumática para eludir las responsabilidades de monstruosos delincuentes empotrados en las afinadas estructuras del poder.

La vida íntima es sagrada mientras no sea de funcionarios públicos que con sus procederes hagan  parte de cáfilas mafiosas para corromper.

Las vidas privadas  de los hombres públicos  dejan de ser privadas para convertirse en públicas como lo decía,a propósito Calibán, ese sí integro periodista boyacense. No se sabe si al presidente Santos le suena ese nombre.

Vicky estigmatizada por defender la verdad deja como testimonio y de seguro como un blindaje para que no la maten este documento argumentado lleno de pasión por el oficio  con un contexto que demuestra la honestidad profesional de su protagonista.


lunes, 23 de mayo de 2016

LA CALLE REAL...EL DEPARTAMENTO DEL QUINDÍO EN UN LABERINTO

LA CALLE REAL

Armenia, mayo 23 de 2016

EL DEPARTAMENTO DEL QUINDÍO EN UN LABERINTO

.-La urna de cristal con vidrios polarizados

.-Carlos Eduardo Osorio un rehén de múltiples secuestradores


Gilberto Montalvo Jiménez


En la historia del Quindío ha habido gobernadores  buenos, regulares y malos.

Pero nunca antes habíamos enfrentado una ineptitud tal que en cinco meses nadie sabe a ciencia cierta para dónde diablos va esta administración.

Un cura de la iglesia católica que fue desplazado al ostracismo por monseñor Fabio Duque Jaramillo porque comprendió que no eran ortodoxas sus actuaciones dentro de ese ministerio.

La decisión de enviarlo en destierro obedeció a que en la intimidad del purpurado se tenía claridad sobre que el trabajo de Osorio  estaba por fuera de los mandatos pastorales y no lo sacó en definitiva para evitarle un escándalo más a esa iglesia.

Los negocios con revestimiento de servicio social no se compaginaban con lo que quería el prelado de entonces  de la iglesia católica en el Quindío.

Su pretendida influencia y su serpentina permanencia en los llamados círculos sociales de Armenia le crearon animadversión dentro del propio clero que no lo veía como un pastor sino como una rueda suelta con un negocio claro  dentro de los parámetros de las dudosas fundaciones.

De un momento a otro y como por encanto saltó a la política con el criterio de que está revestido de poder e influencia sobre la grey pero sin la suficiente capacidad, por  lo menos elemental, para el manejo de la cosa pública.

Servido en bandeja ante el poder supremo del carrielismo y con la multimillonaria inversión de una campaña que aún no se sabe cuánto costó lo elevaron a los altares de la sumisión incondicional de ese esperpento político que ha permeado hasta la saciedad todos los rincones de las administraciones públicas  con los multimillonarios negocios que aunque  los tienen ahítos no se paran en mientes para seguir desbordando la avaricia.

Osorio Buriticá es un rehén múltiple, veamos:


Rehén de  su incapacidad para manejar la cosa pública.

Rehén de unos heliotropos que se sienten dueños de su gobernación porque lo alentaron en su momento para hacerse a canonjías.

Rehén del carrielismo que lo tiene maniatado con un cordón umbilical pecaminoso del cual no se puede liberar porque si lo hace lo dejan en la ruina personal y moral si es que en ese camino no va ya  a pasos agigantados.

Rehén de un grupo de ineptos contratados para diseñar un plan de desarrollo menesteroso en contenido y plagado de plagios, aunque uno de sus contratistas  cada ocho días salga a decir babosadas en el periódico local y a especular con largas disquisiciones lambonas y etéreas cuando su incapacidad es tan evidente que repta de  lado a lado buscando protagonismo, pero pago, claro está.

Dada su esclavitud en manos de toda esta cáfila el solo argumento que  tienen es el de echar culpa de la ineptitud y de la politiquería a la asamblea departamental que está haciendo su trabajo y nada más.

Los diputados no deben  claudicar ante las tentaciones que vienen revoloteando sobre sus cabezas porque al parecer están contra la pared atemorizados frente a los pretendidos amagues de cooptación para caer en las  garras clientelares.

Aprobar un plan de desarrollo desfinanciado,desarticulado, incoherente y plagiado es un monstruo que los puede aplastar.

 No  han desvirtuado una sola de las observaciones que le han hecho a ese plan de desarrollo y salen por las tangentes como el secretario de planeación Álvaro Arias Young, quien sin ninguna vergüenza dice en los altoparlantes de los súbditos de la información que todo está bien y que solo existen unas pequeñas inconsistencias de forma.

Ni Arias, ni Medellín, ni Casasbuenas, ni Edy y menos el gobernador han leído ese esperpento. Con razón en las primeras declaraciones dijo uno de esos genios que eso había sido elaborado por “jóvenes inexpertos”

Incluyen estas vedettes de la planeación cupos de endeudamiento inexistentes por incapacidad técnica de conseguirlos y cuantifican  regalías  cuando eso es un albur que dejaría  las arcas departamentales en una desfinanciación que no le permitiría cumplir con las metas de ejecución del presupuesto.

Elemental mi querido Watson

Pero sigan echando carreta que el ovillo muy pronto se acaba

Le resultaron paganos los plagiarios al cura. No solo copian textos de planes de desarrollos exóticos y extraños sino que lo plagiaron a él, le impusieron secretarios, le hicieron delegar funciones para ordenar el gasto y lo tienen loco haciendo jornadas de evangelización en los montes de la cordillera.

Ese trabajo en Génova durante ocho días es lo más absurdo del mundo porque  cuando se estaba hundieron un plan de desarrollo,  la misericordia en el marco de una estrategia maquiavélica, era alejarlo de la realidad y escaparlo a las montañas del suroriente del departamento a comer frisoles, pintar fachadas  y rezar rosarios.

Lo que no saben es que en las entidades de control están caminando con ritmo acelerado las  cerca de cien investigaciones por desviaciones e incompetencias  en el ejercicio de la administración pública.

Hace unos días un grupo de sus secuestradores lo llevaron amarrado a un condumio dizque para pedirle cuentas. Allí estaban los “civiles” que se creen también dueños de su rehén.

Le pidieron sacudirse del carrielismo, le dijeron de sus asesores incapaces y ruidosos. La respuesta del gobernador del Quindío a ese grupo de sus  plagiarios fue que nunca cambiaría de rumbo con las cuotas políticas del carrielismo y que “como va la vaina va muy bien”

Mientras se conoce  un monstruo como el plagio de apartes del plan de desarrollo de Marsella, Risaralda, después de las denuncias ante las autoridades competentes por otro plagio inicial hechas por el excandidato a la gobernación Néstor Daniel García Colorado, en un nuevo  acto de irresponsabilidad total, los constructores de Armenia, los ingenieros, arquitectos, empresarios  y contratistas están esperando la ruidosa promesa de la Urna de Cristal en materia de contratación.

Mientras el carrielismo tenga bajo su manga la capacidad de contratar la Urna de Cristal del Cura está en el primer piso de la gobernación pero con los vidrios polarizados.



martes, 3 de mayo de 2016

EL CUADRO DE TOULOUSE LAUTREC

LA CALLE REAL

Armenia,mayo 3 de 2016



EL CUADRO DE TOULOUSE

Gilberto Montalvo Jiménez


Y allí estaban las dos, parecían líneas sutiles y con formas simples de un lienzo de Toulouse Lautrec a quienes solo mosquitaba la sensación del delirio lúdico del encoñamiento de un amor a lo mejor furtivo.


Ella con un torso alargado y senos exuberantes dejaba caer una cabellera azabache sobre el regazo de su anatomía sensual y a su antípoda la otra de camuflaje con pantalón vaquero y camibuso de colorines que  la distinguía, además, un pequeño arete de destellos en medio de la mortecina luz del cafetín.


La diva hacía los requiebros naturales de una mujer en celo acomodando de vez en vez su larga cabellera hacia un lado y hacia el otro con trenza aquí o salpicado natural allá, entretanto, el ave rapaz fingía naturaleza acomodando sutilmente los dos envases de cerveza que les creaba una barrera inmodificable en un terreno de solo cuarenta centímetros del cuadrado de la mesa.


Arriba para entender el tono surrealista estaba un reloj terrible y lobo que marcaba muy lento el tiempo, ese que se hacía cada vez más lerdo y taciturno cuando solo faltaban diez minutos para las ocho de la noche aquella.


El susurro de sus voces se parecía al vuelo del moscardón ya que José Luis Perales en el altavoz no dejaba penetrar la intimidad del dialogo de seguro interesante.


Yo esquivo por la natural desventaja del sitio estrecho no tenía mayor capacidad de arrojo que observar detenidamente el cuadro de Toulouse Lautrec.


No cabía duda, en el momento que las cervezas hacían los estragos naturales en la vejiga de la contrincante entró derecho con paso firme y altiva decisión al orinal de las puertas batientes donde solo los  masculinos hacen su oficio de pie.


De un momento a otro salieron raudas, la plaza Bolívar atestada de músicos mendicantes era la pasarela final que las llevaría sin ninguna duda a un camastro como único testigo de su pasión.